EL CULTIVO DE VID EN CANARIAS

El cultivo de la vid se introdujo en las Islas Canarias a partir del siglo XV tras su colonización. Sus nuevos habitantes: gallegos, portugueses, andaluces, catalanes, mallorquines e incluso genoveses fueron quienes introdujeron las variedades extendidas en sus zonas de origen.
Cuando a finales del siglo XIX Europa es arrasada por la filoxera, insecto que ataca a las vides, muchas de las variedades se perdieron, mientras que en las Islas Canarias, al no llegar dicho insecto, se mantuvieron.
Es el cultivo de vid más extendido del archipiélago, con cerca del 36% de la superficie cultivada, distribuidas por islas de la siguiente manera: 11726,9 en Tenerife; 3080 en Lanzarote; 2051,9 en La Palma; 600,7 en El Hierro; 576,8 en La Gomera; 397 en Gran Canaria y 49 en Fuerteventura.
Algunas variedades han ido aumentado su superficie de cultivo gracias a caracteres agronómicos beneficiosos para el viticultor: grandes racimos, elevadas producciones, alto precio por peso, bajo ataque de plagas y enfermedades, fácil manejo del cultivo, etc. Estas variedades locales compiten con variedades introducidas más recientemente con un supuesto valor agro-económico más alto. Este hecho ha contribuido en gran medida al abandono de variedades locales, provocando la escasez de algunas de ellas, llegando incluso a la amenaza de extinción. Ante esta situación alarmante y a fin de gestionar mejor la viña de Canarias, es necesario profundizar en el conocimiento sobre el patrimonio vitícola canario, con el propósito de su conservación, su gestión racional y la posibilidad de su utilización en mejorar el desarrollo agrícola, fundamental para la posterior de cesión de dicho material para su uso por los viticultores.
Es, por lo tanto, una reserva natural de todas aquellas variedades de vid, que los conquistadores, colonizadores y nuevos pobladores de las Islas, quisieron llevar desde sus zonas de origen, hacia las nuevas zonas conquistadas, y es muy posible, que en las Islas Canarias aún se conserven variedades que podrían haber desaparecido en las zonas de donde fueran originarias o al menos supusieran un cultivo tradicional.

                                                                                 http://www.agricomac.eu/1espa/vidcanarias1.html